Una nueva etapa.

Fue una noche donde no se dejo de intentar, donde un grupo dio lo mejor de si, a pesar de las adversidades, de todo lo que teníamos en contra. Fue una noche donde hicimos todos los méritos para ganar, donde no cometimos errores, donde ya habíamos ganado la batalla contra nosotros mismos y gestábamos una batalla de menor importancia contra el rival. Fue la noche en que merecimos ganar.

Y aunque no perdimos, debimos ganar por meritos propios, por preparación técnica y también física, no por deficiencias del rival, claro esta que ellos no realizaron su mejor juego, pero eso no determinó nada, el nivel de compromiso y entrega que manifestaron nuestros jugadores fue el mas grande en nuestra historia futbolística, donde se jugó con el corazón, donde podemos decir llenos de orgullo que se sudó la camiseta.

Esta vez nos toco ser los derrotados, quizás por el destino o por la suerte, si es que existen, nos quedamos en este tramo del camino y vimos a otros avanzar, esto es señal de que todavía debemos mejorar. Pero también es señal que vamos por buen camino, ya que aunque la nostalgia de lo que pudo haber sido nos ciegue si vemos un poquito mas allá podemos notar que si se ganó y mucho, estos muchachos integrantes de la selección son la mejor generación que ha existido hasta ahora, con que buen sabor de boca podemos decir “hasta ahora”, con el sabor que nos da el estar seguros de que ahora viene lo mejor, de que este es el comienzo de una era en la cual nos vendrán grandes cosas y también es el final del principio, aunque suene paradójico es así, es el final de la batalla que no enfrentábamos contra los demás si no contra nosotros mismos, contra los miedos que existían, contra los complejos. Pero eso se acabó, ya podemos estar seguros que nuestros muchachos no le tienen miedo a nadie, que tranquilamente pueden enfrentar a cualquier selección y jugarle de tu a tu a los que mas historia tienen, por que a fin de cuentas la historia es historia y aunque ciertamente pesa, es mas importante el presente, lo único que hacia falta era que nos lo creyéramos todos. Una vez así logramos comenzar esta gesta en la cual convencidos de nuestras habilidades empezábamos la batalla con el rival.

Y tal fue el convencimiento y la preparación que se realizo para esta competición que quedamos invictos, no solo ese hecho es importante, si no el que hayamos quedado invictos frente a las selecciones de primer nivel contra las que jugamos, podemos decir que nos codeamos con los grandes sin ningún tipo de complejos, sin ningún temor y siempre con humildad y respeto.

Y así con la humildad que tuvimos triunfos también tuvimos humildad para salir derrotados en la noche con la que comencé este escrito, tuvimos la madurez para reconocer la derrota en un juego que no merecíamos perder, en un juego que fuimos muy superiores, en una noche que dimos todo, en la noche que merecíamos ganar… pero la caprichosa no quiso entrar.

Aunque en ese juego no salimos vencedores a pesar de todas las virtudes que ya comenté, podemos estar seguros que somos vencedores por lo que se logró. Se logró generar el comienzo de un gran camino en el cual recogeremos los frutos de lo que hemos sembrado, donde dejaremos de comernos las verdes y empezaremos a disfrutar las maduras, por supuesto esto no esta ganado ni mucho menos, para esto hay que trabajar, pero ya tenemos un camino andado y un escenario futuro que nos vaticina grandes cosas.

Se logró la unión de un país dividido por otros factores que no vienen al caso, donde el beisbol es el deporte nacional, pero no el que desata más pasiones. Teníamos tiempo sin ver esta unión en donde todos empujábamos para el mismo lado y donde todos reíamos y llorábamos juntos, donde salimos a la calle a apoyar a nuestra selección y lo mas importante donde todos CREIMOS en lo nuestro.

Logramos superar las burlas de los que históricamente nos humillaban, logramos ganarnos con sudor el respeto, un respeto por el cual no se debería luchar, pero que al fin y al cabo no lo teníamos y logramos recuperar.

Se logro que varios señores mayores, de alrededor de 70-80 años que pude ver, sacaran  su camiseta del año 94, 96 o 98 y la portaran con la ilusión de victoria con la cual estábamos y estamos contagiados todos, ellos que aguantaron mas que todos las burlas, en estos días pudieron disfrutar el éxito del cual todos formamos parte. Si eso no es sentimiento, si eso no es orgullo entonces díganme lo que es.

Se logro que aquí yo no hable del rival, por que esta vez y de ahora en adelante lo que importamos somos nosotros  y nuestra preparación, ya los ídolos no son de otros países, ya los ídolos son de aquí y aunque todavía falta identificación con la liga local, todo indica que el apoyo se irá incrementando.

Se logro trazar un punto de partida de un camino largo, una nueva etapa, que debemos recorrer todos juntos, en donde todos debemos aportar para enriquecer nuestro futbol tanto en el campo como en las gradas, tanto en la principal como en la popular, y así poder llegar a nuestra próxima meta que es el mundial de Brasil.

Aquí no hace falta que mencione nombres ni diga protagonistas, por que aquí todos sabemos de que hablo, hace años esto seria imposible, pero hoy no, hoy tenemos un nivel de identificación con el cual los nombres sobran por que los hombres marcaron historia, esto, también se logró.

Pero no nos podemos quedar solo con lo que se logró, debemos aprovechar todo esto para seguir mejorando y cada uno puede colaborar de una manera distinta. Ya sabemos lo que deben hacer los jugadores, el cuerpo técnico y la federación, lo que debemos entender es lo que nos toca hacer a nosotros, los hinchas.

Y no es más que eso, hinchar, apoyar a nuestro equipo de la liga local, por encima de los extranjeros, a llenar nuestros estadios y poco a poco ir llevando más gente. Eso es lo que debemos hacer, para que el futbol de nuestro país progrese tenemos que invitar mas gente a ver partidos de nuestro torneo, pero de buena manera, mostrando la pasión que aquí se vive, decirles pasteleros y tratar de denigrarlos no va a lograr nada, resulta mejor convencerlos de la calidad que poseemos y de que estamos hechos para cosas grandes. Ese, ese es el camino a Brasil 2014.

Todo esto que nombre muchos lo sabemos, por eso espero que esto lo lean los que aun están renuentes a apoyar nuestro futbol y que de alguna manera conozcan mas la grandeza de lo logrado y por que no, que leer esto sea el empujoncito que les falta para entrar al mundo de nuestro fútbol.

Convencido del gran progreso que hemos logrado e ilusionado con todas las cosas que se nos vienen cierro esta nota con la siguiente frase: “este no es el comienzo del fin, es el final del comienzo”, donde ya adquirimos la madurez necesaria para recorrer esta nueva etapa que comenzamos a transitar, animo cracks!, a seguir poniéndole aguante!

Nos vemos en la popular!                                                                                                                           

Misael Paredes

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